Valentina creció en el campo, montó caballo toda su vida y siempre se ha caracterizado por ser una mujer alegre y muy organizada. Muchos sabrán de ella, pero pocos saben que corre medias maratones y que tiene una silla de montar en su cuarto, sí leyeron bien ¡una silla de montar!

Desde siempre tuvo claro que quería emprender, tanto así que a sus 10 años ya tenía su propia empresa la cual se la vendió a su padre. La idea de The Lab Girl & Co realmente empezó hace cinco años cuando Valentina se graduó como ingeniera química en Francia, en su mente estaba desarrollar una idea que girara en torno a la salud, pero que en poco se desvió hacia la belleza que era lo que de corazón le apasionaba.

Gómez recuerda muy bien que el primer producto presentado al mundo fue el multivitamínico en forma de gomitas, el cual le abrió la puerta intima y genuina a una de las anécdotas más sensibles de su actual socia (en ese entonces su mejor amiga) Isabella Rodríguez. A raíz de esa situación presentó episodios de estrés y depresión, los cuales provocaron una pérdida masiva de su cabello, despertando el anhelo y  deseo en Valentina de ayudar, no solo a su mejor amiga sino también a todos aquellos que estuvieran pasando por problemas capilares similares.